Para la mayoría de los padres de familia resulta un conflicto decidir, si es adecuado mostrar sus estados emocionales frente a sus hijos. La creencia es que si mostramos que estamos enojados, preocupados o tristes los vamos a afectar emocionalmente. Es entonces que preferimos mentir y decir que estamos bien. Esto definitivamente no sirve para nada, pues cuándo un hijo pequeño te pregunta ¿Estás enojado? aunque trates de ocultarlo, los niños lo perciben. ¿Cómo es posible esto?.
De acuerdo a las investigaciones realizadas por el científico Dr. David R. Hawkins, determinó que las emociones se pueden medir ya que son campos de energía. Los seres humanos cuando experimentamos estados emocionales transmitimos energía y también somos receptores de la energía emocional de los demás. Conforme crecemos perdemos la capacidad de percibir la energía porque nadie nos enseña a cómo hacerlo, pero los niños tienen esta capacidad nata. Ellos saben cuando estamos felices y cuando estamos tristes, no podemos engañarlos.
Tus hijos reflejan tus estados emocionales.
Lo más importante es que ellos están aprendiendo cómo expresar sus emociones y gestionarlas de nosotros, ya que nos imitan. Esto ha sido comprobado a raíz del descubrimiento de las “neuronas espejo” realizada por el neurofisiólogo Giacomo Rizzolatti.
Como su nombre lo indica estas neuronas permiten hacer propias las emociones de los demás. Esto es un avance para la comprensión de los comportamientos infantiles ya que implica que en toda relación padres hijos opera un sistema de mimetización emocional que debe ser tenido en cuenta.
Queda claro que en vez de ocultar nuestras emociones requerimos mostrarlas. Cada vez que compartes con honestidad lo que estás sintiendo con tus hijos, les permites que perciban las emociones de manera natural. Es Importante hacer la aclaración a los niños de que tú como adulto a pesar de lo que estás sintiendo, eres capaz de resolver esa situación por tí mismo, de esta manera los liberas de sentirse estresados o preocuparse por lo que te esta pasando. Esto les permite sentirse seguros y seguir disfrutando de ser niños.
Cuando ellos vean que tus estados emocionales son pasajeros y que has podido resolver favorablemente esa situación, les ayuda a aprender que las emociones son pasajeras y que las van a poder gestionar y salir adelante cuando se les presente un problema
Contar con la guía para que aprendas a identificar y gestionar tus estados emocionales es una tarea imprescindible por ello en la escuela SAyDI incluimos la capacitación para padres de familia que les ayuda a lograr este objetivo. Pide hoy una sesión informativa.